Durante la preparación de una boda siempre surgen los nervios, el estrés y, en ocasiones, ¡los enfados entre la pareja! Claro… cuando llega el momento del casamiento y la tarta, cualquier cosa puede hacer que uno de los dos de la pareja explote.
Esto fue lo que le pasó, en este caso, al novio. Fruto, probablemente, de la ansiedad no supo responderle bien a su ya esposa que solo intentaba gastarle una broma. Su reacción… imperdonable. Me parece que alguien no va a tener la noche de bodas deseada.
Imagen: SplitShire